Esta es una Nación que tiene un lugar especial en mi corazón; por su historia, por sus diferentes pueblos y por cómo han sabido mantener unido al país ante tantos, ante enormes desafíos para la convivencia en paz; por cómo aman al rugby, por todo lo que significó este deporte positivamente para la unidad nacional, y por el temperamento que siempre muestran los Bocks al jugar …
En fin, hicimos cuatro viajes a Sudáfrica, combinando con visitas a otros países como Lesoto, Suazilandia y Mozambique, visitando desde reservas y parques llenos de vida salvaje, hasta playas extensas, combinando con culturas, gentes, comidas y paisajes.
En uno de esos viajes pude traer a mis padres para que todos juntos recorramos parte de este apasionante país.
Por otro lado, el aeropuerto de Johannesburgo era mi punto de tránsito obligado entre la RD Congo y Argentina. En muchas idas y venidas tuve que esperar un día entero allí entre que me bajaba de un vuelo y tomaba el siguiente para Argentina.
Esas jornadas las aproveché para realizar excursiones a parques de diversiones, museos como el del Apartheid, parques temáticos muy bien hechos sobre los orígenes del hombre, ya que unos de los restos más antiguos de homínidos, han sido hallados en la región.
También he hecho viajes en globo, y me he alojado en parques donde las jirafas merodeaban alrededor de las cabañas, porque aparte, los sudafricanos son los campeones del campamentismo, y tienen una desarrollada industria referida al aire libre.
Finalmente, he tenido la oportunidad también, como dato de color, de conocer el pueblo vacacional de Santa Lucía, donde a la noche se pueden ver hipopótamos caminando tranquilamente por sus calles y jardines de las casas, ¡aunque Usted no lo crea!
Concretar un viaje es un logro. Y como tal, te abre las puertas a cualquier otro logro, cualquiera que verdaderamente desee tu corazón.